El dieciocho de diciembre la ONU lo ha designado para celebrar el día internacional del migrante.
Es por ello que hoy se ha celebrado en el ÍES Al-Andalus, una actividad sobre la inmigración a la que nuestra Asociación ha asistido como invitada. Previo pase de unos vídeos relativos a la temática la profesora Mª Jesús Narváez, directora de la actividad, ha presentado a tres chicos y a una chica, usuarios de VIAS, para que manifestasen su testimonio de experiencia vital de emigración-inmigración. A continuación se ha abierto un turno de preguntas. Los alumnos asistentes han podido conocer a través de las respuestas dadas por los jóvenes inmigrantes cómo ha sido su travesía de llegada, cómo es su vida en nuestra localidad, qué problemas tienen, etc.
La conclusión ha sido que prácticamente todo el mundo es o ha sido en alguna ocasión migrante, es decir, emigrante o inmigrante, según se vaya o se venga por la carretera de doble sentido que es el movimiento de personas.
Migrar es desplazarse de un país a otro o abandonar la residencia habitual dentro del propio país, en busca de mejores medios de vida. Es una carretera de doble sentido y dependiendo de quien lo diga, será emigrar (salir), cuando lo dice un autóctono del país o lugar que es abandonado, o el mismo hecho se llamará inmigrar (entrar) si quien lo dice es una persona autóctona del país al que llega otra procedente de su país de origen. Con estos dos últimos términos nos referimos a un cambio de residencia, a un movimiento de un lugar a otro, que será temporal o definitivo. De manera que una emigración o salida de un país lleva como contrapartida posterior una inmigración en el país o lugar de llegada.
Desde que la humanidad existe, se han dado movimientos de población. Hispanoamérica es fruto de una gran emigración, salida de españoles hacia América o de una gran inmigración, es decir, llegada de españoles a América. Son las dos caras de la misma moneda.
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